Con 125 votos aportados por la mayoría de las bancadas opositoras, a excepción de la Izquierda y de los legisladores libertarios, la Cámara de Diputados dio media sanción a un proyecto de reforma a la ley de alquileres que reduce el plazo de los contratos de 3 a 2 años y establece que la actualización de los montos sea cada cuatro meses en base a un índice pactado entre las partes. 

Juan Arrizabalaga, referente de Inquilinos Agrupados, le dijo a Canal Extra TV que con esta reforma "están jugando con la vida de 10 millones de inquilinos", señalando que "esto lo que va a generar es una multiplicación de precios y  que mañana le empiecen a llegar mensajes a los inquilinos pidiéndole aumentos para actualizarlo de acuerdo a esta tendencia".

La iniciativa, que fue considerada en el marco de una sesión especial que duró cerca de cuatro horas, deja sin efecto la actualización anual de los contratos y el índicador que rige en la actualidad, que es un un mix que promedia la evolución del IPC y el índice de variación salarial, que es realizado por el Banco Central. 

Al tratarse de una media sanción, el proyecto ahora deberá ser tratado por el Senado, cámara en la que la oposición podría no contar con los votos necesarios para convertirlo en ley.

El proyecto fue rechazado por 112 diputados, de los cuales 99 fueron aportados por el Frente de Todos (FDT), 4 por la izquierda, 3 libertarios y 2 del interbloque Federal; mientras que 3 legisladores se abstuvieron de votar (2 socialistas y una legisladora del FDT). 

Los legisladores que responden al candidato a presidente por La Libertad Avanza, Javier Milei, se opusieron incluso al dictamen de mayoría y de minoría, ya que querían directamente la derogación de la ley de alquileres.

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La iniciativa fue sancionada con el respaldo de los votos de 116 diputados de Juntos por el Cambio, 4 del Interbloque Federal -dos de Córdoba Federal y dos de Identidad Bonaerense-, 2 de Juntos por Rio Negro, 2 del bloque Ser y 1 del Frente de la Concordia de Misiones.

Claramente negativos

En este marco, el inquilino precisó que "los cambios son claramente negativos. Baja de tres años a dos el tiempo el plazo de los contratos, los aumentos ya no van a ser anuales, sino cuatrimestrales y el precio ya no va a tener tope, sino que va a ser puesto lo que ellos llaman ‘pacto entre partes’, que en realidad lo va a poner la inmobiliaria y la parte propietaria, lo que va a generar es una multiplicación de precios".

En tanto, afirmó que "cada ataque a la ley lo que hace es que mañana le empiecen a llegar mensajes a los inquilinos pidiéndole aumentos para actualizar de acuerdo a esta tendencia, y eso es lo que nos pasa cada vez que se discute la ley o intentan modificarla".

"Esto lo lograron Juntos con el Cambio y sus aliados con el dictamen de minoría que es terrible para los inquilinos, y que profundiza la crisis de la vivienda. Pero también voy a decir algo: hubo 125 votos a favor para modificarla y 112 en contra. Sí hubo 16 ausentes, de esos 16, 13 eran de Frente de Todos, y una de las tres abstenciones también. O sea: la ley no se perdía hoy. Entonces hacemos un llamado de atención muy serio, porque estamos jugando con fuego; estamos jugando con la vida de 10 millones de inquilinos ", disparó.

"Están jugando con la vida de 10 millones de inquilinos"

En qué consiste el proyecto 

El proyecto de reforma aprobado establece que la vigencia de los contratos entre inquilinos y propietarios se reduzca de tres a dos años, con una actualización que podrá efectuarse dentro de un plazo de entre cuatro y doce meses, con un sistema de actualización acordado entre las partes.

En ese sentido, establece que las partes deberán convenir el mecanismo de actualización del precio del alquiler al inicio de la relación locativa, pudiendo aplicar a tales efectos el índice de precios al consumidor (IPC), el índice de precios mayoristas (IPM) y/o el índice de salarios (IS), elaborados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) o una combinación de dichos índices.

La oposición pudo lograr una media sanción de la reforma de la ley de alquileres luego de conseguir el quórum reglamentario de 129 diputados, que fueron aportados por JXC, los libertarios, Interbloque Federal, Juntos por Rio Negro, y el bloque Ser, que responde al gobernador electo de Santa Cruz, Claudio Vidal.

Previo al inicio del debate, el plenario del cuerpo rechazó la posibilidad de tratar la derogación de la ley de alquileres vigente -propuesta por Juntos por el Cambio- y la de poner en tratamiento un proyecto del Frente de Todos para regular los alquileres temporarios por plataformas, ya que para habilitarlos en el temario se necesitaban mayorías especiales (dos tercios de los presentes).

El debate de fondo fue abierto por el presidente del bloque del FDT, Germán Martínez, quien defendió la iniciativa que impulsaba el oficialismo en materia de alquileres, que busca dar continuidad a la norma vigente e incorpora "una serie de incentivos para poder aumentar el stock de viviendas en alquiler".

En su exposición, Martínez dijo que "es fácil echarle la culpa a una normativa en una situación compleja como la que se está viviendo, pero la complejidad que se vive siendo inquilino o propietario es totalmente diferente" porque el inquilino "vive con la espada de Damocles, y los propietarios buscan subir su situación económica".

Previo a que exponga Martínez, el plenario legislativo rechazó el pedido de incluir una docena de proyectos opositores que buscaban derogar la ley de alquileres, ya que no obtuvieron los dos tercios de los votos necesarios para su tratamiento sobre tablas, al conseguir 124 legisladores por la positiva y 110 diputados votando por la negativa.

La sesión de hoy se concretó luego de que el pasado 5 de julio, en la última sesión del cuerpo, Juntos por el Cambio fracasara en un intento de derogación de la ley vigente, y consiguiera, junto a otros opositores, firmar un pedido para sesionar hoy, teniendo en cuenta que las PASO interferían en el esquema de trabajo parlamentario.

El ajustado margen de votos con que se aprobó el proyecto dejó en claro el porqué los diputados no pudieron avanzar con el tratamiento del tema en los últimos catorce meses, tiempo que transcurrió desde que se emitieron los dictámenes de comisión sobre la legislación en cuestión.