La Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) estimó que la superficie cultivada en la campaña 2023/2024 crecerá 1,2%, hasta los 34,55 millones de hectáreas respecto al ciclo anterior, mientras que la producción daría un fuerte salto de 70,4%, hasta los 134,3 millones de toneladas, tras los magros resultados del ciclo previo a causa de la sequía.

Teniendo en cuenta este salto productivo, se proyecta un aumento en las exportaciones de 49%, alcanzando los US$34.507 millones, una cifra US$11.315 millones superior a la de la campaña recién finalizada.

"Después de lo que pasamos con la sequía, soy optimista porque tenemos zonas muy buenas en cuanto a lo que se vislumbra de producción, como el sur de la provincia de Buenos Aires, y tenemos que tener las velas prendidas para que pase lo mismo en el norte", dijo el presidente de la entidad bursátil, José Martins, en una conferencia de prensa tras la presentación del informe .

"Después de lo que pasamos con la sequía, soy optimista porque tenemos zonas muy buenas en cuanto a lo que se vislumbra de producción, como el sur de la provincia de Buenos Aires, y tenemos que tener las velas prendidas para que pase lo mismo en el norte", dijo José Martins.

"Estamos frente a una cosecha razonable, que no va a ser la mejor porque tenemos todo un entorno macroeconómico y demás que ha hecho que muchos no desplieguen su potencial, pero no va a ser mala la cosecha", remarcó el directivo.

La mejora proyectada también se reflejará en la recaudación fiscal, que rondará los US$14.053 millones, 50% más en la comparación interanual; mientras que con el valor agregado se ubicaría en US$36.647 millones, lo que implica una mejora del 51%, equivalente a 1,9 puntos del PBI.

Con relación al escenario climático, se remarcó que en las últimas semanas comenzaron a registrarse lluvias en distintas zonas del área agrícola y que durante la primavera, El Niño se activará manteniendo su acción hacia finales del verano.

De esta manera, en lo que respecta estrictamente a los granos gruesos (soja, maíz, girasol y sorgo), desde la BCBA estimaron que la superficie total de estos cultivos de verano sumarán 27,4 millones de hectáreas. 

Se espera un incremento en el área ocupada por la soja de 5,6% hasta los 17,1 millones de hectáreas y del 2,8% para el maíz hasta 7,3 millones de hectáreas.

En contraposición, se proyectó una baja en la superficie de girasol de 13,6% hasta los 2,1 millones de hectáreas y de 5,3% en el caso del sorgo, con un área de 0,9 millones de hectáreas.

En base a estos números, se estima que la cosecha de soja marcaría un fuerte incremento de 138,1% respecto a la campaña 2022/2023, hasta las 55 millones de toneladas; mientras que el maíz se ubicaría en torno a las 55 millones de toneladas (+61,8%) y la de sorgo en 3,5 millones de toneladas (+40%).

Lo contrario sucedería con el girasol, ya que la proyección productiva de la BCBA es de 4,3 millones de toneladas, lo que implica una merma interanual de 10,4%.