Tras las elecciones generales en las que el candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, se posicionó como la fuerza más votada, el conductor de Tarde Picante, Tomás Méndez, analizó los resultados y afirmó que “claramente se vio beneficiado porque Milei era muy malo, Bullrich era pésima, Schiaretti no tenía fuerza y Myriam Bregman es lo de siempre”. En este sentido, sostuvo que “abajo del escenario de Massa había pueblo, cabecita negra, que necesita morfar, que necesita laburar; que necesitamos convivir en paz en comunidad y que no son los rubios de ojos celestes los que precisamente lo votaron”. 

En su editorial, Méndez remarcó que debido a que fue este sector el que hizo que gane el candidato oficialista, estos mismos serán los que “le van a exigir que ahora sí, necesitan morfar y necesitan laburar como la gente, y si necesitan comprarse un ventilador poder comprárselo”.

“Esos son los que estuvieron ahí y le dijeron a Massa: ‘Guarda, guarda. Porque no caminamos más’”, argumentó.

Cachetazo va, cachetazo viene

En su editorial, se preguntó luego si los resultados del domingo pueden ser caracterizados como una elección buena. Y se respondió: “La verdad que fue una buena elección, sobre todo por el cachetazo a un loco que se animó a desplazar a un partido político que manejaba los hilos del sistema. Pero el sistema perdió; el primer candidato del sistema pierde, que es Patricia Bullrich. Y queda Sergio Massa, que es un candidato del sistema claramente”, enfatizó.

En este sentido, se refirió a Milei como “un tipo que era descabellado, que no tenía ideas, que había agrupado a gente, que cada uno decía lo que quería, que estaban locos, no había asesoramiento”.

“Llegaron acá con el 30% de los votos. Nada mal para cachetear al sistema. Si el sistema no se da cuenta de que ha recibido el cachetazo, pues entonces puede perder dentro de poco también. No en el balotaje seguramente, pero posteriormente. La economía está desordenada y esos son los datos de hoy, con lo cual hay que ordenarla”, completó.