Un duro e ¿inesperado? cruce se vivió en las últimas horas entre miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Sucedió luego de que su presidente, Horacio Rosatti, hiciera el martes por la noche un llamado público a la “unidad nacional”, en relación al recambio que se dará en el poder Ejecutivo el próximo 10 de diciembre. 

Rosatti, quien también es presidente del Consejo de la Magistratura de la Nación, participó de la jornada “170 años de la Constitución Nacional”, que se dictó en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora. 

En ese contexto académico fue que el titular de uno de los Poderes del Estado se mostró en coincidencia con el llamado a un gobierno de unidad nacional que propone el candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa. 

Sin nombrarlo

Sin nombrarlo, es además la segunda embestida de Rosatti sobre el líder libertario Javier Milei, luego de que días atrás se mostrara en contra de la dolarización, en una entrevista concedida al diario El País, de España.

Los dichos de Rosatti no quedaron ahí. Su colega en la Corte, Ricardo Lorenzetti, salió a cruzarlo abiertamente en una nota enviada a todos los integrantes del cuerpo colegiado. En la misiva, Lorezentti dijo que era “inaceptable” lo que pareció un alineamiento con la posición de Massa, afirmó que “el ‘populismo judicial’, que es cambiar según sopla el viento, es inapropiado como modelo judicial” y señaló que en las redes sociales los dichos de Rosatti fueron considerados expresiones de “panquequismo jurídico”. 

Lorezentti consideró “inaceptable” los dichos de Rosatti, lo acusó de fomentar “el ‘populismo judicial’, que no es otra cosa que “cambiar según sopla el viento”.

Además, Lorenzetti acusó a Rosatti de que su discurso en la Universidad de Lomas de Zamora “fue precedido de llamados a los medios y redes con el mismo mensaje, lo que evidencia una actitud deliberada de hacer saber esa opinión, razón por la cual no puede haber dudas de la intención de mostrar una postura respecto del proceso electoral en curso”.

“Esas declaraciones no fueron consensuadas por la Corte Suprema, y por lo tanto es necesario aclarar que, a pesar de que el presidente debería representar a la institución con acuerdo previo, no es el caso y no la representa”, finalizó Lorenzetti.

En comisión

Un total de 18 pliegos enviados por la administración de Alberto Fernández para ascender a fiscales, jueces y camaristas del Poder Judicial recibió este miércoles dictamen favorable tras una audiencia pública en el Senado, en la que hubo puntos de desacuerdo entre oficialismo y oposición respecto a una postulante.

La discrepancia tuvo que ver con la designación de María Laura Manín, propuesta como vocal de la Cámara Nacional de Apelaciones, cuestionada por miembros de la oposición por haberse encontrado en una lista complementaria y haber salteado a otros ternados.