El cielo sobre Malvinas fue cruzado por un avión de Aerolíneas Argentina que descendió cerca de Puerto Stanley con un grupo de argentinos que tuvieron una misión: reafirmar nuestra soberanía sobre el territorio austral, usurpado desde 1833 por los británicos.

De ese grupo de jóvenes nacionalista y peronistas del Movimiento Nueva Argentina, más Héctor Ricardo García, alma mater del diario “Crónica”, se destacó su líder y mentor: Dardo Cabo, periodista, metalúrgico y justicialista de ley.

Recordar a Dardo Cabo, tanto desde la militancia como de quienes les interesa la historia argentina reciente, tiene tres datos concretos: su participación en el Operativo Cóndor del 28 de septiembre de 1966; la supuesta colaboración de éste en el asesinato del dirigente sindical Augusto Timoteo Vandor; y su asesinato, por parte de la última dictadura, el 7 de enero de 1977 en una fuga fraguada.

Quizás su rol de periodista sea la faceta menos destacada por el común, ya que su afición por la acción, los “fierros” y por el “vivir peligrosamente” parece que han prevalecido en el imaginario.

Dardo Cabo y el Operativo Cóndor: Entre la pluma y el fusil

Dardo Manuel Lito Cabo nació el 1° de enero de 1941 en Tres Arroyos, provincia de Buenos Aires, y fue hijo del dirigente metalúrgico Armando Cabo y de María Campano. Su padre, muy allegado a Evita y Perón, sobre todo cuando integró el consejo directivo de la Confederación General del trabajo cuando su secretario general fue José Espejo, sufrió la cárcel luego del golpe de Estado de 1955.

La militancia de Dardo, enrolado en el peronismo y el nacionalismo se intensifica en la época de la Resistencia con la insipiente Juventud Peronista y asistiendo a las charlas del Instituto Juan Manuel de Rosas. Fue, como su padre, afiliado a la Unión Obrera Metalúrgica, donde militó bajo la conducción de Vandor.

Al tiempo se unió al grupo nacionalista Tacuara y lideró sus Brigadas Sindicales, pero al tiempo, se separa de ellos, disintiendo en la concepción que este grupo tuvo sobre el movimiento obrero. El 9 de junio de 1961, como homenaje al levantamiento del general Juan José Valle de 1956, se fundó el Movimiento Nueva Argentina, del cual Dardo fue uno de los impulsores.

Los años ‘60 fueron de una notable actividad para este militante de la causa nacional. Informó sobre él una revista de la época: “… ex vendedor de libros, periodista… Entre 1960 y 1961 estuvo detenido en Caseros… conoció la notoriedad en 1964, a raíz del atentado contra el doctor Frondizi. Fue reconocido en rueda de presos, por un testigo, como el autor de los disparos, pero declaraciones de Paulino Niembro y un abogado de la CGT parecieron desvirtuar tal testimonio. El juez doctor Luis María Rodríguez ordenó su libertad, y así fue el año pasado (1965) jefe de la primera guardia personal de Isabel Martínez de Perón.”

Efectivamente, el primer viaje de Isabel a nuestro país fue coordinado por el mayor Bernardo Alberte, delegado de Perón, y miembros de la Juventud Peronista se encargaron de su custodia, entre los que se destacaron Alberto Brito Lima, líder del Comando de Organización, y Dardo Cabo.

Dardo Cabo y el Operativo Cóndor: Entre la pluma y el fusil

Pasado unos meses, el proyecto vandorista de un “Peronismo sin Perón” intentó probar suerte electoral en Mendoza. Otra vez Isabel debió volver a la Argentina como representante del líder para frustrar la intentona divisionista. Y otra vez Cabo y sus compañeros del MNA la acompañaron, a pesar de que el propio Cabo seguía ligado a Vandor.

A tal punto estaba unido al líder metalúrgico que ese joven alto y delgado de 25 años, con su alias de Lito, periodista y afiliado a la UOM, dio la versión oficial sobre los hechos de la confitería Real en Avellaneda, donde fue asesinado Rosendo García y otros en un tiroteo entre militantes sindicales.

La periodista de la revista Panorama María Cristina Verrier tuvo su palabra y, con el tiempo, su corazón…

El miércoles 28 de septiembre de 1966 dieciocho jóvenes obreros y estudiantes, peronistas, pasajeros del vuelo 648 de Aerolíneas Argentinas que unía Buenos Aires - Río Gallegos, desviaron la aeronave hacia las Islas Malvinas con el fin de recuperar simbólicamente la soberanía argentina y generar contradicciones en el flamante gobierno dictatorial de Onganía. Se consumó así el Operativo Cóndor.

El miércoles 28 de septiembre de 1966 dieciocho jóvenes obreros y estudiantes, peronistas, pasajeros del vuelo 648 de Aerolíneas Argentinas que unía Buenos Aires - Río Gallegos, desviaron la aeronave hacia las Islas Malvinas con el fin de recuperar simbólicamente la soberanía argentina y generar contradicciones en el flamante gobierno dictatorial de Onganía. Se consumó así el Operativo Cóndor.

Tras su vuelta al continente Cabo fue encarcelado. Se casó con María Cristina estando preso en Ushuaia. Desde la cárcel envió al historiador Norberto Galasso una carta prólogo para su trabajo “Discépolo y su tiempo”, en su 3ª edición de 1967. Allí escribió:

“Hace unos días, le decía en una carta al Dr. Arturo Jauretche que “algo está pasando en el plano de la cultura nacional”. Acababa de leer “Discépolo y su época” y estaba entusiasmado por el arrebato suyo de decir tantas verdades que hace rato muchos queremos encontrar en los libros argentinos y que algunos se desesperan en ocultar. (…) Siga usted cabalgando, amigo Galasso, que lleva un pingo flor en su pluma y que todavía tiene que decir una punta de cosas más que harán parar los pelos de punta a estos tilingos que tiene n por críticos literarios a esas “revistas de ejecutivos” …

A su actividad militante le unió, como escribí antes, su pasión periodística, pues Dardo Cabo formó parte de las redacciones de las revistas “Extra” y “Semana Gráfica”.

Dardo Cabo y el Operativo Cóndor: Entre la pluma y el fusil

Más controversial fue su supuesta participación en 1969 del “Operativo Judas”, donde se dio muerte, en la sede de la UOM, al “Lobo” Vandor. Dicho hecho de sangre fue reivindicado dos años después por el Comando "Héroe de la Resistencia Domingo Blajaquis" del Ejército Nacional Revolucionario. Blajaquis fue, casualmente, uno de los muertos en La Real y que años atrás Dardo trató, con sus palabras, de despegar de responsabilidad a Vandor. Allí Cabo nada tuvo que ver, sino más bien fue responsabilidad de un sector sindical cercano a la CGT de los Argentinos, pero aún no es un tema cerrado…

Fundó la Agrupación Peronista de Base 17 de Octubre (Apeba 17) y se incorporó al grupo Descamisados. Se integró por poco tiempo (en el ínterin entre una y otra formación) la Mesa del Trasvasamiento – junto Roberto Grabois, del Frente Estudiantil Nacional (FEN), y Alejandro “Gallego” Álvarez, de Guardia de Hierro –, para luego integrarse en la “orga” Descamisados y de allí a Montoneros.

Miguel Bonasso referencia su amistad con Dardo y su “convencimiento”, que posibilitó que virase a posiciones montoneras. Cabo dirigió la revista oficial de la organización “El Descamisado”, donde escribió sus editoriales y algunas notas de importancia. Fue uno de los impulsores del Partido Peronista Montonero.

Encarcelado nuevamente por la última dictadura, el 7 de enero de 1977 fue fusilado junto con Roberto Rufino Pirles en un “traslado” desde la Unidad Penitenciaría Nº 9 de la ciudad de La Plata. Lo acribillaron a tiros cuando acababa de cumplir 36 años.