Más de 13,4 millones de ecuatorianos irán hoy a las urnas para elegir entre los candidatos Daniel Noboa y Luisa González, quienes deberán completar el período de mandato del presidente Guillermo Lasso, hasta mayo de 2025.

Los ecuatorianos van a las urnas después de que en mayo pasado Lasso disolviera la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, cuando se disponía a votar una moción de censura en su contra por presunta malversación de fondos públicos, que él niega, y pidiera la convocatoria a elecciones, amparado en el recurso constitucional conocido en Ecuador como "muerte cruzada".

En el proceso electoral, el 9 de agosto fue asesinado a balazos el candidato Fernando Villavicencio, cuando salía de un mitin político en Quito.

Luego de ese llamado, Noboa y González pasaron al balotaje por ser los dos candidatos más votados en la primera vuelta del 20 de agosto pasado.

El proceso eleccionario, que se desarrollará entre las 7 y las 17 hora local, comenzó el jueves con el voto de los presos sin sentencia en firme, y siguió el viernes con el voto domiciliario para mayores de 50 años o para personas con discapacidad.

Luisa González y Daniel Novoa dirimirán quien ocupa la presidencia de Ecuador, con la urgencia de devolverle paz a un país en el que la violencia y el crimen se volvieron moneda corriente, tras la salida y la persecución de Rafael Correa.
Luisa González y Daniel Novoa dirimirán quien ocupa la presidencia de Ecuador, con la urgencia de devolverle paz a un país en el que la violencia y el crimen se volvieron moneda corriente, tras la salida y la persecución de Rafael Correa.

Inseguridad

Envueltos en chalecos antibalas y con resguardo de las fuerzas de seguridad, el joven empresario Noboa, de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN), y Luisa González, del movimiento Revolución Ciudadana, liderado por el ex presidente Rafael Correa (2007-2017), desarrollaron una campaña de segunda vuelta caracterizada por reuniones con gremios, grupos sociales y delegados de organismos internacionales.

Fueron pocas las reuniones multitudinarias en comparación con campañas electorales de años pasados en Ecuador, por el temor a que se produzca algún nuevo hecho de violencia.

Ecuador vive unos niveles de inseguridad y violencia sin precedentes, atribuidos por las autoridades al crimen organizado y al narcotráfico, que hicieron que el país pasase en apenas cinco años de 5,8 a 25,32 homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes en 2022, la cifra más alta de su historia.

Ecuador elige al presidente que concluirá el mandato de Guillermo Lasso

Fragilidad económica

A la crisis por la inseguridad se suma la difícil situación económica que deberá afrontar el próximo gobernante al recibir un país endeudado, con serios problemas en el sector sanitario, educativo y agropecuario, entre otros, que podría empeorar por los efectos del fenómeno climático de El Niño, que se prevé llegue a finales de año.

Además, el próximo jefe de Estado deberá gobernar con la previsible reducción de ingresos fiscales como consecuencia de la prohibición de explotar un importante pozo petrolero en la Amazonía.

Ello porque el pasado 20 de agosto, los ecuatorianos votaron en un plebiscito a favor de que se cese la explotación del Bloque 43-ITT, uno de los yacimientos situados dentro del Parque Nacional Yasuní, un enclave biodiverso situado en la Amazonía ecuatoriana.