Un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA) advierte que ya en la actualidad 6 de cada 10 argentinos trabaja menos de 8 horas diarias y que reducir la jornada laboral podría generar un aumento de los precios.

El informe refiere que el debate instalado por el gobierno en el Congreso nacional “no tiene en cuenta una realidad que marca que dos de cada tres trabajadores realiza tareas por menos de 40 horas semanales, lo que tornaría abstracta la discusión para la mayoría de los asalariados”.

IDESA, la consultora que dirige el economista Jorge Colina, indica que en este momento lo prioritario debería ser “ordenar el Estado y las instituciones laborales para crecer con más empleos de calidad”.

“La idea de reducir la jornada laboral no es nueva, ni propia de Argentina”, refleja el estudio al comparar el caso de la Unión Europea donde se analiza también bajar la jornada laboral, como forma de evitar pagar salarios más altos.

Señala que la discusión en el viejo continente “está más centrada en mejorar la calidad de vida de los trabajadores que en aumentar el empleo".

Datos del Indec

Además, IDESA remarca que la discusión planteada en el Congreso parece desconocer los datos de la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC, que reflejó que en 2023 un 15% de los asalariados trabaja más de 48 horas semanales, un 19% entre 40 y 48 y un 66% menos de 40 horas semanales

“En Argentina 2 de cada 3 trabajadores ya lo hacen en jornada reducida”, remarca el estudio que además advierte que para achicar el día de trabajo a seis horas, la productividad de las empresas debería crecer un 33%, cuestión que de materializarse la iniciativa la iniciativa el mayor costo “se trasladaría a los precios".