La Comisión Nacional de Valores (CNV) dispuso una nueva regulación para el mercado de divisas, al bajar de 200 millones a 100 millones de pesos el máximo diario destinado a operación con Contado con Liquidación (CCL) y Cedears o ADRs (Certificados de Depósitos Argentinos), para agentes locales.

Asimismo, determinó para las operaciones en el exterior que las transferencias deben hacerse a una cuenta de un beneficiario final y no a la de un intermediario o "broker".

La medida se dispuso a través de la Resolución General 984/2023 publicada hoy en el Boletín Oficial y, según fuentes del organismo regulador, "alcanza a grandes inversores y no afecta a la enorme mayoría de usuarios de dólares financieros y pequeños inversores".

La norma tiene -según los considerandos- carácter "extraordinario y transitorio", y su vigencia se extenderá "hasta tanto hechos sobrevinientes hagan aconsejable su revisión y/o desaparezcan las causas que determinaron su adopción".

"En el actual contexto económico imperante y en el marco de la reciente evolución del mercado de cambios, se torna necesario reducir la volatilidad de las variables financieras y contener el impacto de las oscilaciones de los flujos financieros sobre el normal funcionamiento de la economía real", subrayó la Comisión para fundamentar las modificaciones.

Supervisión y control

De ahora en adelante, los agentes de Negociación, de Liquidación y Compensación y de Corretaje de Valores Negociables deberán constatar que las operaciones de sus clientes del exterior posean CDI (Clave de Identificación) o CIE (Clave de Inversores del Exterior) y no revistan el carácter de intermediarios. "Son para su propia cartera y con fondos propios y que el volumen operado diario no supere el importe de $100.000.000", se especificó.

Además, la Resolución reveló que el Banco Central le solicitó formalmente a la CNV “la implementación, en el ámbito de su competencia, de medidas alineadas con lo normado por dicho ente; a los fines de evitar las prácticas y operaciones elusivas detectadas en el ejercicio de sus facultades de fiscalización”, a raíz de haber notado el “incremento en el volumen de negociación por parte de inversores extranjeros" identificados por CIE o CDI.

En ese sentido, la autoridad monetaria pidió que se verifique si el incremento “se corresponde con posibles maniobras elusivas".